"Aquel afán de ser, árbol amigo, que me dejó grabado en tu corteza fue tan grande y de tal naturaleza que mientras viva viviré contigo; Pues hasta cuando el tiempo, su enemigo, me haya borrado de tu fortaleza, y estén muertas las manos y la cabeza que me han dejado aquí, como testigo, aquel afán de vida que me inflama subirá con tu savia confundido y, en un último esfuerzo de su ardor, se asomará al temblor de cada rama, al sagrado calor de cada nido y al silencio felíz de cada flor."
El Arbol |
2 comentarios:
Se puede grabar un soneto en un árbol,pero tu, grabaste un árbol con los sonetos de amores lejanos
Muy bella la imagen entre letras escritas de la pluma de tus sílabas.
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